El propietario de la taberna Eligio, en Vigo, falleció el pasado viernes, 11 de agosto. Tenía 73 años. Cerrada en 2015, la taberna Eligio siguió siendo un lugar de reunión de amigos. Allí Carlos, siempre entrañable, discreto y generoso, continuaba recibiendo a la hora del aperitivo, a los amigos y amigas para compartir un vino y algo de comer y, sobre todo, compartir conversaciones llenas de inteligencia y anécdotas, con el mismo sentido de la discreción que en la época dorada del Eligio, en los años sesenta y setenta, cuando la taberna era frecuentada por Lugrís, Laxeiro, Celso Emilio Ferreiro, Cunqueiro, Castroviejo, Lodeiro, Blancoamor, Maside, y tantos otros.
El último vino que compartimos con él fue el pasado mes de junio, después de una reunión en la Fundación Laxeiro. Allí nos dirigimos Carlos García-Suárez, Xosé María Barreiro, Antón Pulido, Román Pereiro y Javier Pérez Buján y allí compartimos con Carlos y su mujer, vino, conversación y algo de picar.
En la Fundación Laxeiro nos sumamos al dolor causado por su pérdida y queremos transmitir todo nuestro apoyo a su familia.